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Trinidad Rodríguez y su familia.
Trinidad Rodriguez Sanz, toda una vida dedicada al servicio de los vecinos de Herrera

Trinidad Rodriguez Sanz, toda una vida dedicada al servicio de los vecinos de Herrera

A ella le queda el orgullo de saber que “todo el esfuerzo y la dedicación por mi trabajo no ha sido en balde”; encontrando reconocimiento y cariño entre los vecinos de Herrera.

maría josé marchena

Miércoles, 18 de mayo 2016, 21:21

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Trinidad Rodriguez Sanz lleva toda su vida dedicada al mundo de la hostelería en Herrera del Duque; podría decirse que la tradición le viene de cuna, pues desde bien pequeña ha visto a su padre, Victor Carlos Rodríguez regentando los princpales locales en la localidad.

Aún recuerda con anhelo sus primeros años de vida cuando con tan sólo 4 años de edad pasaba las tardes sentada enel Kiosko de la plaza o en el bar del Casino donde sus padres trabajaban para sacar a la familia adelante.

Temprana fue su incursión en el trabajo y desarrollo de este oficio al que ya le lleva dedicados más de 40 años de su vida. Empezó a ayudar en el negocio familiar cuando con tan sólo 12 años servía en el Bar Carlos I y en el Corral de la Pacheca, terraza veraniega en la que supieron convertir la antigua fábrica de harina y que sacaron adelante con mucho esfuerzo por parte de toda la familia. Pasando por ser los regentes del primer pub nocturno que hubo en Herrera del Duque; Pub Charlie se llamó y estuvo funcionando varios años allá por los 80 en lo que hoy es el Hostal Carlos I.

De su padre recuerda su trabajo incansable por y para los demás. Pendiente siempre de todos los detalles para dar buen servicio a sus clientes. Podría decirse que ese vagaje se encuentra hoy en Trini, como la llaman los amigos; siempre al frente de todo, organizando escrupulósamente hasta el último detalle para la satisfacción y disfrute de sus comensales y clientes. No olvida, por su puesto, la figura de su madre; aunque, en este caso, siempre a la retaguardia velando por la integridad familiar. De Marina Sanz recibe la fortaleza, la constancia y la perfección en los pequeños detalles.

Y, como no podía ser de otra manera, su vida profesional ha seguido estando siempre vinculada al mundo de la hostelería. En la actualidad es la regente de su propia cafetería desde donde se ha convertido en toda una institución en la localidad.

Con el Café-Bar La Marina, hace primero un homenaje a su madre, y después las delicias de todos aquellos que la visitan y prueban sus especialidades. Bien es cierto, que ha crecido mucho dentro de este sector, pues ha sabido darle un aire nuevo gracias a la realización de diversos cursos culinarios especializados en tapas; recuerda haber viajado a Málaga a profesionalizarse aún más si cabe y también algún otro organizado por la Diputación de Badajoz de los que se ha servido para mejorar en su trabajo.

Trinidad Rodríguez Sanz puede decir que su etablecimiento siempre ha participado en todos los eventos culinarios que se han celebrado en Herrera del Duque. Por ejemplo, en la reciente celebración de la Ruta de la Tapa que este año contaba con su IX edición cosechando el primer premio en cinco de ellas, incluida la de este año.

Sobre esto, no se olvida nunca Trini de su propia familia. Los dos Esteban de su vida (hijo y marido) en los que siempre ha encontrado un apoyo y el respaldo necesario para afrontar cualquir reto a los que han tenido a bien dedicarse a lo largo de su larga trayectoria profesional. Hablar de ellos, le llena de orgullo y le satisface saber que entre los tres forman un gran pilar en los que se sustentan los valores de la familia y la dedicación al trabajo. Y, por supuesto, la colaboración desinteresada de muchos de sus amigos por los que siente una gran gratitud.

En el currículum profesional de Trinidad Rodriguez Sanz también encontramos la participación junto a su sobrino, Jaime Rodríguez, en el concurso Corderex de Extremadura donde cosecharon un segundo puesto en el año 2014, en una dura competición en la que se enfrentaban con otras parejas de chefs a lo largo de toda la región.

Lo que le ha dado el empuje para abrir su propio servicio de cátering ampliando los servicios de su local, que ahora es algo más que una mera cafetería. También puede considerarse un lugar tranquilo de reuniones donde poder degustar exquisitos menús.

Como final de la converación nos quedamos con las palabras de la propia Trinidad y el orgullo que le deja a ella el saber que todo el esfuerzo y la dedicación por su trabajo no ha sido en balde; encontrando reconocimiento y cariño entre los vecinos de Herrera.

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